Muchos piensan que batallar con uno mismo es una innecesaria pérdida de tiempo y de energía. Otros, por el contrario, estamos convencidos que enfrentarse consigo mismo es la prueba más difícil a superar en la vida, a la vez la victoria más importante cuando se logra. Son muchos los obstáculos, proscribir la envidia, borrar el resentimiento, dominar cualquier enfado, escuchar a los otros, en suma, alcanzar serenidad y equilibrio, establecer un sentido de existencia.

CONTRA MÍ MISMO

Soy un hombre luchando
Contra sí mismo
Una huella seguida de otra
En el crucero de hora imprecisa
Entre el día y la noche.
Soy eso
Un hombre anudando un cuello
Un par de ojos mirando
Tras la niebla imbatible
Un humo que marca el sitio
Dejado por el fuego.
Una tenaza apenas
De endurecidos dedos
El nombre no conocido
La sombra que tiembla
Como astilla de leño.
Polvo soy trajinado
En laberintos
Sin forma
Sin destino
Sin hora de partir.

Rodolfo Sánchez Garrafa

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