Las Tres Partes de Mi Alma

Las tres partes de mi alma se reflejan como una sola.
Y como una sola se buscan en la distancia...

Una sueña a ser gaviota, que atraviesa el cielo mirando desde lo alto,
bañada de rayos de Sol, se refugia en los sombríos árboles de los campos...
Y esta alma se pinta de blanco, como si en su pecho no llevara algún pecado.
En la conciencia diminuta, aguarda la espera de su bien amado...

La otra parte es la ausencia, esta no habla, sólo observa.
Contempla su contexto torcido y luego solloza, buscando a Dios,
en su mundo dormido...
Se mira en los espejos del cielo, y filosofa con los pensamientos
que hay dentro de su infinito...

La última se consuela lo perdido, se perdona lo que entonces es prohibido.
Es la que duerme a las otras en un largo viaje de diversos sentidos.
No es inquieta; es serena, no es soberbia.
Su escudo es la sagacidad sin prejuicios...
Es la que amanece antes, antes de que las otras partes amanezcan.
Es la que duerme al último, después de que las otras partes se hayan dormido...

Y cuando las tres partes se juntan, ¡Vaya milagro!
¡por fin se han entendido..!

Marilú Zanella
21/06/2001 - 9:19pm

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