Desde otra mirada III ~ China Contino

Tercera y última parte de este relato tan apropiado para esta semana del amor y la amistad. Esperamos lo disfruten.

Si no leíste la primera parte, comienza aquí: Desde otra mirada I

Desde otra mirada III

Jorge llamó a Laura la mañana siguiente para decirle que había conseguido entradas para un espectáculo musical y que invitaba a Delia, la mamá de Laura, para que fuera con ellos. A las 7 y media pasaría por ellas y cortó.
A Laura le agradaba el buen humor y la predisposición amable que mostraba Jorge.
Francisco estaba ansioso por encontrarse con Laura; esa tarde sería buen momento para expresar algunas cosas que sentía por ella. Llegó al bar media hora antes. Miraba por la ventana la gente que pasaba apurada o tranquila pero casi todos alegres. Laura lo vio desde la calle y se detuvo. Estaba abstraído en sus pensamientos. ¿Qué guardaban esos ojos tristes de orfandad temprana?
Laura entró al café y abrazó a Francisco con mucha calidez.
Hablaron de estudio, de trabajo, de las novedades del barrio y a eso de las 7, Laura dijo:
- Fran, debo irme en un rato, aunque lo estoy pasando muy bien.
- Pensaba proponerte comer juntos en tu casa, claro, yo llevo la comida.
- Me hubiera encantado pero tengo un compromiso Fran.
- Laura, quisiera hablar más tiempo con vos, ¿no podrías cancelar tu salida y …
- No, Fran es que Jorge nos invitó a mamá y a mí…
- Está bien Laura. No llegues tarde.
Se despidieron hasta otro día, pero Francisco supo que ya no padecería más por Laura. Ahora sí, la trataría como a una amiga a pesar de su sentimiento.
Laura llegó a su casa sin ganas de nada. Se cambió apurada y pensaba que un hombre como Francisco siempre le cuestionaría su dedicación al trabajo. Estaba molesta; sonó el timbre, llegaba Jorge.
Las pocas veces que se cruzaron Laura y Fran, él estaba ocupado con algún trabajo y el saludo era rápido y frío. Un tiempo después, Laura, se comprometió con Jorge a quien no amaba pero se sentía atraída por el amor que éste le ofrecía.
Cuando Francisco se enteró, cayó en un estado de tristeza tal que perdió interés por muchas cosas.
Laura preparaba su boda y pensó llamar a Francisco. Necesitaba hablar con él. Se debía esa despedida. No quería cambiar su vida sin escuchar esa voz tan querida. Llamó varias veces pero Fran parecía no estar nunca.
Unos días después se encontró con Quique, un amigo de Fran que le dio la noticia que se había producido un cortocircuito en un lugar donde Francisco estaba trabajando y le causó quemaduras de alguna consideración en los ojos. Laura trató de ocultar su pena pero comenzó a llorar frente a Quique que pudo calmarla.
- Se va a curar Lauri. Está en casa de su madrina ya que le vendaron los ojos por unos días.
- ¿Podrías acompañarme Quique? Quisiera verlo cuanto antes.
Al día siguiente, Laura que casi no podía contenerse llegó con Quique a casa de tía Isabel.
Entró Laura al cuarto donde Francisco estaba acostado y parecía dormido.
No sabía si hablarle o dejarlo descansar. Los calmantes aliviaban el dolor de las quemaduras. Luego de un rato, Francisco despertó.
- ¡Hola Fran! ¿Por qué no me hiciste llamar? Hace tanto tiempo que nos conocemos y me entero por casualidad de tu accidente.
- Laura… No quería molestarte. Gracias por venir.
- Pensé mucho en vos, en lo que hacés para vivir, en que realmente…
- No digas nada Lauri, siempre me viste como alguien que estaba en tu vida sin estar, alguien a quien un título hubiera convertido en una persona capaz de merecerte… Además, la suerte está echada. Te aburrirías con un electricista con la vista disminuida.
- No, Francisco. Yo no veía tu interior y ahora sí.
- Laura, siempre voy a amarte…
La fiesta de casamiento fue estupenda. Laura y Jorge se mudaron a Belgrano. Pero nunca supo Jorge porqué Laura lloró tanto en su noche de bodas.

FIN

China Contino

El Drama de Aly

Ideas y creaciones digitales, arte visual

Desde otra mirada III ~ China Contino

Desde otra mirada III